Diario de a bordo - Francia

Después de la increíble suerte que tuvimos en Bilbao y San Sebastian, con avería de choche y noche gratis de hotel incluida, cruzamos la frontera pensando que ya agotamos toda nuestra suerte sin saber que todavía el destino nos deparaba más sorpresas. 

Nuestro primer punto en Francia fue Toulouse. Ya en el viaje del año anterior nos salvó la vida dándonos el impulso energético y económico que necesitábamos para continuar pero esta vez nos dio eso y mucho más. Mientras tocábamos en la "Plaza du Capitole", entre pase y pase un hombre se acercó a comprar nuestro cd y a hablar con nosotros. Se trataba de Julian, un francés argelino cuyo abuelo era Almeriense. Acompañado por su hija Camille, habló con nosotros en castellano con visible nostalgia por España, Andalucía y esos territorios perdidos de la infancia, además también era músico y veía en nosotros eso que no se atrevió a hacer en su juventud. Después de grabar otro de nuestros vídeos en versión reducida en la misma "Plaza du Capitol", nos abrió de par en par las puertas de su casa, dándonos cama, suculenta comida, ducha y varias botellas de excelente vino francés. Su generosidad fue increíble y nuestro agradecimiento infinito para Julian y toda su familia, gracias y gracias desde aquí; ¡Viva la Gente Buena! Además grabamos con él otro de nuestros vídeos en versión reducida en "L'ecruze de Castanet".

Tras despedirnos de Julian y su familia con el mismo sentimiento con el que se despiden familiares muy cercanos, emprendimos el camino hacia Montpelier. Llegamos demasiado tarde para tocar, así que dimos un paseo por la ciudad acompañados por Yanoulla y su amiga Lucille. Esa noche dormimos en casa de Yanoulla y al día siguiente, después de que la policía nos echara por tres veces, al final conseguimos tocar en la "Plaza de la Comedí", donde grabamos otro de nuestros vídeos reducidos. Para dormir repetimos sitio y de nuevo la generosidad de nuestra anfitriona terminó emocionándonos. Gracias Yanoulla desde aquí, ¡Viva la Gente Buena! 

De Montpelier pasamos a Marsella, en donde tocamos en el "Vieux Port" y grabamos otro de nuestros vídeos bajo el gran espejo del viejo puerto. Esa noche dormimos en la carretera, en un merendero que encontramos en el camino, fue la primera vez en el viaje que utilizamos la tienda de campaña. A la mañana siguiente tomamos rumbo a Torino.

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